El día estuvo lleno de felicidad, disfrutamos de visitas guiadas por el Templo y sus alrededores, una charla pública, canciones, cuentacuentos y, por supuesto, " Cumpleaños feliz" con una tarta de cumpleaños.

En la charla, nuestro Maestro Residente, guen Kelsang Rigden, destacó los diversos aspectos del Templo y explicó que guarda un tesoro: las enseñanzas milenarias de Buda sobre el amor, la sabiduría y la compasión, tan necesarias en estos tiempos difíciles que estamos atravesando.

Al final del acto, todos compartimos un sentimiento de gratitud por la infinita bondad de nuestro más querido Guía Espiritual, el venerable Gueshe Kelsang Gyatso Rimpoché, resumido en dos palabras:
¡GRACIAS GUESHELA!