El apego y el tantra

Por lo general, el budismo enseña que el apego es una perturbación mental que debe ser evitada y finalmente eliminada, pero en el mantra secreto existe un método para transformar el apego en el camino espiritual.

Sin embargo, para practicar este método, debemos hacerlo con destreza. En esta práctica utilizamos el apego para generar gran gozo y entonces utilizamos esta mente de gran gozo para meditar en la vacuidad. Sólo de este modo se puede transformar el apego.

El apego por sí mismo no se puede utilizar directamente como un camino porque es un engaño, e incluso en el mantra secreto debe ser finalmente abandonado. En la práctica auténtica del mantra secreto, la mente de gozo generada a partir del apego medita en la vacuidad y de esto modo elimina todas las perturbaciones mentales, incluyendo el apego mismo.

Esto es similar al fuego producido al frotar dos trozos de madera que finalmente consume la madera de la que surgió.

Aquellos que no tienen destreza o cuyas mentes no están adiestradas, no pueden realizar estas prácticas de transformación. Por este motivo, los yoguis y grandes meditadores del pasado dijeron que para alcanzar las realizaciones del mantra secreto, debemos controlar la mente adiestrándonos en las etapas del camino del sutra. Sin establecer estos firmes cimientos, no es posible alcanzar la experiencia pura del mantra secreto.

Por lo tanto, es muy importante que tanto el Guía Espiritual como el discípulo tengan una mente controlada y una motivación impecable. Aunque nos consideremos budistas y tomemos refugio en las Tres Joyas todos los días, esto no es suficiente para practicar el mantra secreto.

Debemos tener en cuenta que el gran gozo espontáneo de la etapa de consumación del mantra secreto no es lo mismo que el placer ordinario que se obtiene al mantener una relación sexual.

El gran gozo espontáneo sólo se experimenta cuando, gracias al poder de la meditación, causamos que los aires internos entren, permanezcan y se disuelvan en el canal central y, como resultado, la gota blanca se derrita y fluya por el canal central.

Utilizar el gran gozo espontáneo para meditar en la vacuidad era la práctica esencial de los grandes maestros de mantra secreto de la antigua India, como Saraha, Nagaryhuna, Tilopa, Naropa y Maitripa, y de los grandes maestros tibetanos, como Marpa, Milarepa, Gampopa y Yhe Tsongkhapa.

Al igual que estos maestros lo consiguieron en el pasado, nosotros también podemos hacerlo ahora. El camino supremo para alcanzar la iluminación es la unión del gran gozo espontáneo y la vacuidad.

Para más información, véanse Caminos y planos tántricos y La luz clara del gozo.